Lactancia materna en tiempos de COVID
Medidas para garantizar la continuidad de la lactancia ante la infección por SARS-CoV-2
Del 1 al 7 de agosto se celebra en más de 170 países la Semana Mundial de la Lactancia Materna, cuyo objetivo es promover una forma natural de alimentación, contribuyendo a mejorar significativamente la salud, desarrollo y supervivencia de los lactantes en todo el mundo, proporcionando nutrientes de alta calidad. El lema de este año es “Proteger la Lactancia Materna: una responsabilidad compartida” y se da en el marco de la pandemia por Covid-19, centrándose en la importancia de evitar la discriminación de las madres lactantes en todos los ámbitos, ofreciendo apoyo familiar y comunitario enfatizando el vínculo entre la lactancia materna con los diferentes sectores.
Para promover y sostener la lactancia materna es necesario el compromiso y el apoyo de toda la comunidad (el acompañamiento de la pareja, la familia y todo el entorno). A su vez, los ámbitos de trabajo y de estudio necesitan contemplar licencias por maternidad / paternidad, espacios para la extracción de leche y horarios reducidos para disponer de tiempo para alimentar al bebé con leche materna en estos contextos.
Desde el inicio de la pandemia, el brote de COVID-19 ha sido un motivo de estrés para todo el mundo, particularmente para las madres que están amamantando y se preocupan por la salud de sus bebés. El impacto de la separación de este binomio en el inicio vs la continuación de la lactancia materna puede ser devastador. En caso de que una madre con sospecha o confirmación de infección por SARS-CoV-2 esté en condiciones clínicas óptimas, y de acuerdo con su voluntad, se debe evitar la separación de la ésta y su bebé, adoptando las medidas preventivas correspondientes. La decisión de separar o no a la madre de su bebé debe ser individualizada.
En caso de que haya separación temporal de la madre y el RN, será esencial ofrecer apoyo para que se pueda garantizar la lactancia materna. Esto se podrá hacer mediante la extracción de leche manual o mecánica, procurando que posteriormente la madre pueda alimentar a su bebé con la leche extraída.
Si la madre lactante se contagia después del nacimiento, se recomienda mantener y promover la lactancia materna, continuando con las medidas preventivas especificadas. La lactancia materna favorece el paso de anticuerpos al recién nacido.
BENEFICIOS DE LA LACTANCIA MATERNA
ES BUENA para los bebés
Los protege de muchas infecciones, y por lo general, tienen menos probabilidades de sufrir síntomas respiratorios graves cuando se enferman; disminuye el riesgo de diarreas severa; celiaquismo; neumonías; muerte súbita; otitis; neumonías; alergias; desnutrición; obesidad; favorece el desarrollo cognitivo.
ES BUENA para las mamás
Las hormonas que se liberan en el cuerpo durante la lactancia promueven el bienestar y pueden aliviar el estrés y la ansiedad; disminuye el riesgo de cáncer de mama y útero; protege contra la osteoporosis y favorece la recuperación física. “La leche materna siempre está disponible”.
TIPS SOBRE LACTANCIA Y COVID – 19
¿Es seguro amamantar y alimentar a los bebés con leche materna extraída durante la pandemia del COVID-19?
El SARS-CoV-2 se propaga por contacto directo de una persona infectada a otra cuando tose, estornuda o habla. Hasta la fecha no hay evidencias que se transmita de la madre al bebé a través de la leche materna. Se ha demostrado que es seguro amamantar cuando una madre tiene otras enfermedades virales, como la influenza.
¿Mi bebé puede seguir amamantándose o tomando la leche materna extraída si doy positivo para el COVID-19?
Sí, los bebés pueden seguir tomando la leche materna, aunque haya un resultado positivo del COVID-19.
Si tengo COVID-19, ¿puedo estar en la misma habitación que mi bebé?
Tratar de mantener una distancia razonable cuando sea posible. Es necesario utilizar tapaboca que deberá ser cambiado en caso de tos o estornudo, o ante cada nueva toma y lavarse las manos cuando se entre en contacto directo con el bebé o para el amamantamiento. Se recomienda amamantar fuera de la cama para evitar el contacto del recién nacido con superficies que pudieran estar contaminadas. Evitar hablar o toser durante el amamantamiento. Continuar tomando estas precauciones hasta estar sin fiebre por 24 horas sin haber ingerido antitérmicos, ó hasta que hayan pasado por lo menos 10 días desde que los primeros síntomas del COVID1-9 empezaron y éstos hayan aliviado.
¿Cómo puedo mantener mi producción de leche si estoy enferma con COVID-19?
Extraer leche manualmente o con sacaleches (extractor), durante los primeros días posteriores al nacimiento del bebé. La extracción frecuente (o el amamantamiento con las precauciones estrictas mencionadas anteriormente) deben ser acordes con las demandas de alimentación de tu bebé, entre 8 y 12 veces al día. Utilizar un tapabocas, lavarte las manos cuidadosamente con agua y jabón, y limpiar bien todas las partes del extractor y biberones.
¿Cómo puedo proteger a mi bebé de la infección por COVID-19?
Lavarse las manos frecuentemente con agua y jabón, durante al menos 20 segundos. De lo contrario usar desinfectante para manos (alcohol en gel o alcohol diluído al 70%). Evitar tocarse la cara, los ojos o la boca sin lavarse las manos. Limpiar las superficies que estén visiblemente sucias o posiblemente contaminadas que tu bebé pudiera tocar.
Un cuidador sano puede alimentar al bebé con la leche extraída, debiendo lavarse bien las manos antes de tocar los biberones y alimentar o cuidar al bebé. Se debe lavar y esterilizar el extractor después de cada uso.
Fuera de tu hogar, es imprescindible utilizar tapaboca manteniendo distanciamiento físico de al menos 2 metros y evitando espacios públicos siempre que sea posible. Asegurarse de que todas las personas que viven en el hogar eviten tener contacto directo con cualquier persona con síntomas respiratorios, como tos, o personas con probabilidad de tener COVID-19.
Desde el inicio de la pandemia el Servicio de Puericultura de la Maternidad Oroño no se ha visto interrumpido, sino que se adaptó a las necesidades y condiciones de cada paciente, mediante un protocolo puntualmente diseñado para el acompañamiento, y asesoramiento de las madres y sus familias, funcionando diariamente desde el primer momento del nacimiento.
Magdalena Bucci, María Florencia Pardo, María Laura Vitto, Carolina Arroyo Iriarte - Licenciadas en Obstetricia. Servicio de Puericultura de la Maternidad Oroño
