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Neumonología: La población más vulnerable al humo de las islas
15 sep, 2021

Neumonología: La población más vulnerable al humo de las islas

Los niños pequeños y los adultos mayores son quienes sufren más problemas respiratorios, al estar expuestos al humo que previene de las quemas en las zonas de las islas.

Los que están en el extremo de la vida son los que más problemas respiratorios pueden sufrir producto del humo que llega de las islas. Los bebés, los niños pequeños y los adultos mayores son las poblaciones más vulnerables a las quemas que se vienen produciendo entre 2020 y 2021, años en los que crecieron las consultas a especialistas por este tipo de afecciones.

En el caso de los adultos mayores, al tener menos defensas, tienden desarrollar enfermedades de base que pueden empeorar su situación. Los más chicos, en tanto, no tienen el sistema respiratorio desarrollado y les puede provocar algún tipo de irritación, enfermedad o contraer alguna alergia que tenían genéticamente predispuesta, que sin el humo no se hubiese manifestado.

Pero más allá de la edad, hay que distinguir a dos tipos de poblaciones: las que tienen afecciones respiratorias previas y las que no la tienen. Los que más sufren son los pacientes alérgicos, asmáticos, con Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC) y los que tienen enfermedades cardiovasculares.

Aunque en menor medida, en aquellas personas que no tienen enfermedades previas ni antecedentes, el humo también puede conllevar algún riesgo para la salud, causar irritación en la vía superior, tanto en la garganta como en los ojos o la nariz.

En tanto, en el primer grupo, pueden observarse estas consecuencias:

Pacientes asmáticos y con EPOC: las quemas producen exacerbaciones, además de posibles secuelas a futuro.

Pacientes cardiovasculares: descompensaciones cardíacas por aspiración del humo.

Pacientes alérgicos: exacerbaciones que pueden manifestarse con rinitis o conjuntivitis.

La irritación en la vía aérea es mucho más profunda que si hubiera un aire más respirable. Por estas razones, es fundamental la consulta con el médico especialista. El paciente con afecciones previas tiene que estar controlado, hacerse los chequeos correspondientes, sobre todo en estas épocas de humo.

Deben acudir a los centros médicos donde no hay circulación de coronavirus para que los atienda un cardiólogo o neumonólogo. Al “quedate en casa” para prevenir el Covid, se le suma la recomendación de “quedate en casa” y así evitar la inhalación del humo que llega de las islas de Entre Ríos. Pero siempre es conveniente estar en contacto con el especialista para comparar chequeos cardiológicos hechos con anterioridad.

Si un paciente EPOC está exacerbado y se enferma de coronavirus, las consecuencias serán mucho más graves. Los pacientes con enfermedades cardíacas que contraen Covid son pacientes de mayor riesgo, factor que se suma al humo que se respira hace varios meses.

A las personas con enfermedades cardíacas se les recomienda hacer ejercicio. Lamentablemente, por ahora es mejor abstenerse o hacerlo desde su casa y transitar lo menos posible por la calle. Aunque el tapabocas protege, el humo pasa igual. El contexto de pandemia se suma al humo: esta combinación de situaciones pueden causar serios trastornos para la salud de quienes tengan antecedentes.


Dr. Rogelio Pendino - Médico neumonólogo. Grupo Oroño.

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