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La ecografía ocular, ultrasonografía o ultrasonido ocular es una prueba que utiliza ultrasonidos para obtener la imagen de la estructura ocular. Los ultrasonidos son sonidos de frecuencia muy alta que están por encima de la capacidad de audición del oído humano.

Existen varios tipos de ecografía ocular, cada una de ellas con sus particularidades.

• Ecografía A o A-scan

Se utiliza para medir el tamaño de las estructuras oculares y calcular la potencia de la lente intraocular necesaria en la cirugía de la catarata.

• Ecografía B o B-scan

Se utiliza para obtener imágenes del interior del ojo, y en menor medida de la órbita. Se convierte en una herramienta indispensable cuando hay una opacidad de la córnea, del cristalino o del humor vítreo de tal magnitud que impida una visualización directa del fondo de ojo.

Es de elección en el diagnóstico de afecciones vitreorretinianas, particularmente en casos de desprendimiento de retina y/o coroides.

En ojos de diabéticos con hemorragia vítrea es esencial para mostrar la naturaleza y extensión de las anomalías, para monitorear la progresión de la enfermedad y en la evaluación previa a una cirugía.

Este método sirve además para valorar, medir y seguir los nevos (lunares) que aparecen en el fondo de ojo.

Es la prueba complementaria no agresiva más importante en la evaluación clínica de tumores intraoculares para poder diferenciarlos. Además, proporciona una medición exacta de la altura del tumor, algo muy valioso para monitorizar su crecimiento o regresión.

Sin dudas, una de las exploraciones más complicadas para el oftalmólogo es la exploración del globo ocular traumatizado. El paciente puede tener un dolor muy intenso y ser incapaz de abrir los párpados, por lo que la ecografía tiene un gran valor en estos casos. Sin embargo, en lesiones muy extensas, pueden impedir una evaluación completa con esta técnica, por lo que es importante que los exámenes se lleven a cabo sistemáticamente de la mejor forma posible, con el fin de obtener resultados óptimos.

• UBM o ultrabiomicroscopía

Es un ultrasonido de alta frecuencia que se utiliza para obtener imágenes del segmento anterior del globo ocular. Obtiene imágenes de alta definición que son necesarias para valorar pacientes con glaucoma, tumores y antes de la implantación de lentes fáquicas en la cirugía refractiva.

PROCEDIMIENTO La ecografía B, que es la ecografía que más comúnmente realizamos en la clínica, no requiere ningún tipo de preparación previa.

Al paciente se le insensibiliza al ojo con gotas anestésicas y se coloca un gel para facilitar la transmisión de los ultrasonidos. La exploración tiene una duración aproximada de 10 minutos.

Se utiliza un pequeño instrumento muy similar a un “micrófono”, llamado transductor, que se coloca sobre la superficie frontal del ojo y emite ondas de ultrasonidos. Estas ondas sonoras de alta frecuencia se transmiten al globo ocular y se recibe su eco.

El transductor es el responsable de enviar pequeños pulsos de ondas acústicas de alta frecuencia, estas rebotan sobre los distintos tejidos o fluidos que se encuentran dentro del ojo y el aparato registra los cambios mínimos del sonido. Una computadora convierte este eco en una imagen con diferentes tonos de grises que aparece en la pantalla. Finalmente, estas imágenes obtenidas son interpretadas por un profesional especializado.

UNA TÉCNICA SEGURA

Esta exploración indolora, no agresiva y dinámica puede llevarse a cabo en la consulta. Es una técnica totalmente inocua para el paciente pudiendo, por tanto, puede ser realizada cuantas veces sea necesario sin riesgo alguno para los ojos.

Es posible aplicarla en niños, desde el nacimiento, convirtiéndose en una herramienta de inestimable valor en la detección de tumores como el retinoblastoma, causas congénitas o adquiridas como la retinopatía del prematuro o ciertas enfermedades infecciosas.

La multiplicidad de datos que se obtienen con esta exploración así como los recientes avances tecnológicos que ha experimentado, hacen que con esta técnica se puedan realizar evaluaciones diagnósticas muy exactas, por lo que es actualmente un componente esencial de la práctica clínica oftalmológica.

ANTECEDENTE DEL ULTRASONIDO EN OTRAS DISCIPLINAS

El uso práctico del ultrasonido se ha desarrollado lentamente, en buena parte por las limitaciones impuestas por el material. En 1912 se realizó el primer experimento en el que se utilizó el ultrasonido en la búsqueda del naufragio del Titanic. En la Segunda Guerra Mundial se desarrolló el SONAR (sound navigation and ranging, navegación por sonido) para detectar submarinos. Después de la guerra, el Dr. Douglas Howry aplicó esta tecnología a la medicina.

En 1956 fue utilizado por primera vez en oftalmología para evaluar un tumor intraocular. Le siguieron muchos años de descubrimientos y avances para configurar definitivamente la técnica como la conocemos hoy en día.

Dra. Soledad Barlatey. Médica Oftalmóloga. Posgrado de Alta Especialidad en Ultrasonido Ocular y Orbitario.

Dr. Francisco Martínez Melella. Médico Oftalmólogo. Director Médico de GO Oftalmología.